“El informe final de la administración concursal desvela “múltiples e importantísimas” irregularidades en el club vallecano. Pide juzgar a Teresa Rivero y al gerente por arruinar al equipo con su gestión.
El 27 de junio de 2011, el Rayo Vallecano entró en concurso de acreedores. José María Ruiz-Mateos, que controlaba el club a través de su esposa, Teresa Rivero, había entregado la cuchara pocos meses antes con la sorprendente venta del club a Raúl Martín Presa. Comenzaba entonces un caso de arqueología contable extrema. Un abogado y un economista con ayuda de una inspectora de Hacienda entraron a gestionar el club por orden judicial. Lo que allí encontraron tras desmadejar las cuentas es una galería de los horrores contables: pagos en negro, una caja G de contabilidad no ordinaria, evasión fiscal, cesión de derechos de jugadores a sociedades de Ruiz-Mateos… El informe, fechado el pasado 14 de mayo y al que ha tenido acceso El Confidencial, destripa una época en el fútbol español.
“En el caso del Rayo Vallecano, la generación de insolvencia se produce como consecuencia de la pésima y deficiente gestión económica, administrativa, contable y fiscal de los anteriores propietarios de la sociedad, hablamos concretamente de la familia Ruiz-Mateos, que sistemáticamente incumplía sus obligaciones legales”, señala el informe. Fuentes de la familia Ruiz-Mateos afirmaron ayer que desconocían la existencia de este informe y mostraron su sorpresa. Estas son algunas de las claves del documento.
El texto, de 70 páginas, explica que el Rayo “no ingresaba en la Tesorería general de la Seguridad Social y Agencia Tributaria las cantidades retenidas a sus trabajadores o que estos tenían contratos privados por los que no cotizaban”. Los administradores concluyeron que el Rayo era una empresa zombi, que solo vivía gracias al poco celo de la Administración para cobrarle impuestos..
(…)
Las declaraciones tributarias del Rayo eran exiguas: “El sistema habitual consistía en la presentación de declaraciones trimestrales cuyo resultado era el ingreso de una cantidad simbólica”. El club ya fue absuelto por delito fiscal por la Audiencia de Madrid por fraude en el IVA e IRPF entre 1996 y 2002. Aún quedan dos procedimientos de instrucción: uno por fraude en el IVA e IRPF entre 2005 y 2008 por 6,029 millones de euros, y otro por 10,8 millones que según la Agencia Tributaria el Rayo defraudó en cuotas de IVA entre 2009 y 2011.
El informe de los administradores, el abogado José Baltasar Plaza y el economista Luis Pérez Gil (fallecido este verano), señala que “era norma habitual el pago semanal a los trabajadores de sus nóminas en efectivo metálico, significando que en estos últimos años el club no tenía cuentas corrientes en entidades bancarias”. Los administradores no han podido saber de dónde procedía ese dinero en efectivo.
(…)
El Rayo salió del concurso de acreedores el 15 de enero de 2013, sigue cómodamente instalado en Primera y es uno de los ejemplos que pone la Liga cuando habla de reducir las deudas con Hacienda. Aparentemente, poco tiene que ver con el club que fue hasta hace poco, probablemente el más negro de los años negros del fútbol español.”
De la información publicada en El Confidencial (16.10.15.), firmada por Rafael Méndez.
Se puede leer completa en: http://www.elconfidencial.com/deportes/futbol/2015-10-16/caja-b-evasion-fiscal-pagos-a-rumasa-asi-saquearon-los-ruiz-mateos-el-rayo-vallecano_1058902/